Yo no quiero atar. Yo quiero atarte.

Yo no quiero atar. Yo quiero atarte.

Yo no quiero hacer nudos, yo quiero arroparte con la cuerda, quiero tensarla y presionarte, quiero clavarte las ganas en la carne. Quiero estar presente y quiero dejarte, quiero oírte respirar. 

Quiero hablarte cuerpo a cuerpo,

quiero

atarte

cuerpo a cuerpo. 

Una cuerda en sí, ella sola no es nada. Líquida, latiendo, deseante pero vacía. Una cuerda que se me enreda en las piernas en las manos hasta en la lengua, una cuerda que se me enreda en los ojos, que se me enreda en las ganas. Me ato, porque me hablo cuerpo a cuerpo, me busco, me encuentro. 

Pero yo no quiero buscar en otro sitio, ni en otro cuerpo, lo que ya tengo delante:

Yo
Quiero
Atarte.